Eddy Galarza: un líder formado en el tatami y comprometido el Taekwondo

El Taekwondo no solo forja atletas, también forma líderes. Uno de ellos es Eddy Galarza, presidente de la Asociación Cruceña de Taekwondo, quien ha hecho del servicio, la disciplina y la innovación sus pilares de gestión. Su historia está profundamente ligada al arte marcial, tanto que, como él mismo dice, “el Taekwondo ha sido parte de mi vida desde el primer día de nacido”.

Hijo del maestro Eddy Edgard Galarza Franco y hoy esposo, de Heydy V. Méndez, Galarza creció entre entrenamientos, competencias y valores que marcaron su carácter. “Mi papá fue mi mentor, y junto a mi esposa han sido los grandes motivadores para que hoy esté al servicio del Taekwondo cruceño”, afirma con orgullo.

Una gestión enfocada en modernizar y fortalecer la base

Durante su gestión, la Asociación Cruceña de Taekwondo ha experimentado una transformación significativa, combinando tradición con tecnología.
Entre los avances más destacados se encuentran:

• La creación de una base de datos digital de atletas, que permite un registro transparente y confiable en cada competencia.
• Tomas de examen más eficientes y digitalizadas, con procesos claros y accesibles.
• Apoyo constante a los atletas que representan a Santa Cruz en eventos nacionales e internacionales.
• Capacitación continua para profesores, entrenadores y árbitros.
• Inversión en equipamiento deportivo y tecnológico, incluyendo la adquisición de camas de video replay profesional y computadoras para fortalecer la gestión administrativa.

Cada una de estas acciones refleja un compromiso real con el crecimiento del Taekwondo en el departamento, impulsado por una visión moderna y colaborativa.

Desafíos que fortalecen la convicción

El camino no ha estado exento de dificultades. Galarza reconoce que la falta de apoyo gubernamental y la crisis económica nacional han limitado el acceso a recursos. La Federación Boliviana de Taekwondo apoya en todo lo que está en sus manos. Sin embargo a veces no alcanza, pero seguimos adelante porque creemos en nuestro deporte”, señala.

También menciona la necesidad de capacitar más personal de apoyo, ya que el crecimiento del Taekwondo cruceño ha sido tan grande que demanda una estructura más sólida para la organización de eventos y competencias.

Valores que trascienden el tatami

Más allá de los resultados deportivos, Galarza destaca que el verdadero espíritu del Taekwondo radica en dos valores fundamentales: respeto y disciplina.

“Ser presidente no me pone por encima de nadie. Cada atleta, profesor y padre de familia merece respeto. Y la disciplina es el camino que nos lleva a ser grandes no solo en el deporte, sino en la vida”, concluye.

 Un legado de trabajo

Para los próximos años, la meta es clara: seguir profesionalizando el Taekwondo cruceño. Galarza sueña con ver a los atletas con acceso a sistemas electrónicos actualizados, campamentos de alto rendimiento y apoyo financiero integral, que cubra no solo competencias, sino también alimentación, fisioterapia y preparación física.

“Mi legado será dejar una Asociación más sólida y fuerte. En esta gestión trabajamos y crecimos, incluso sin el apoyo esperado de las instituciones del gobierno, pero con el compromiso y el corazón de nuestra comunidad taekwondista”, expresa.